domingo, 30 de marzo de 2014

Me levanto, y lo único que hago es repetirme una y otra vez el asco que doy. Hay un eco profundo rebotando en mi mente una y otra vez, insultándome, diciéndome lo asquerosa que soy, diciéndome "chica, deberías morir", y es triste. Porque no puedo hacerlo desaparecer, porque digo que sí una y otra vez pero esos gritos se oyen cada vez más fuertes. Te levantas cada mañana, esperando que algo cambie, pero nada cambia, es más, todo va cada vez peor. Cada vez que abres los ojos, alguien te clava una puñalada trapera, alguien te dice lo poco que le importas, alguien te abandona.
Y estoy cansada. Estoy cansada de intentar creer que será un día nuevo, un día bueno, y solo resulta ser peor que el anterior. ¿Por qué me tiene que pasar esto a mí?
Sé que hay gente que tiene un horror de vida. Lo sé, y esto solo me hace sentirme más egoísta. Pero no hace que el dolor se vaya, no hace que todo desaparezca.
¿Sabéis esa sensación de querer desaparecer? Pues yo la tengo a cada momento, cada vez más, rondando mi mente sin parar. Quiero cerrar los ojos y dormir por miles de años, y cuando despierte, quiero que todo haya desaparecido, quiero que yo, simplemente, no sea yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario